Gibraltar: La subida a la gran Roca

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Este enclave, donde la leyenda sitúa una de las columnas de Hércules, es un espacio natural y multicultural único. A la largo de la historia se ha distinguido por representar un cruce de culturas, religiones, lenguas y costumbres, en cuyas calles se mezcla el acento andaluz con el británico.

La primera imagen que nos ofrece la gran Roca, es la de una fortaleza, reflejándose así la función militar que ha tenido hasta fechas muy recientes. Pero hay que subir a lo que hoy constituye una importante reserva natural, para descubrir una realidad bien distinta. Un espacio y unos paisajes que han permanecido ajenos a los avatares de la Historia y que respiran por todos lados un aire andaluz y mediterráneo. Es aquí, en lo más alto de la roca, desde donde podremos disfrutar de unas extraordinarias vistas sobre la bahía de Algeciras, el Mediterráneo, las costas y montañas de las provincias de Cádiz y Málaga y, a espaldas del Estrecho y la costa africana. Donde vislumbrar el imponente monte Jebel Musa que durante muchos siglos ha sido el límite del mundo conocido, la última frontera de los antiguos navegantes. Sin olvidar la presencia de los famosos monos de Gibraltar o macacos de Berbería que nos acompañarán durante gran parte del recorrido .


Longitud

13 km

Altura máxima

412 m

Desnivel

407 m

Dificultad

media/alta

Tiempo excursión

día completo